Dr. Héctor A. Iriarte
Esta es una pregunta muy común entre
los expositores noveles y los que no lo son. Normalmente el handler luego de
finalizada la categoría en la que compitió nuestro ejemplar, le comenta al
propietario cuáles fueron los comentarios del juez (si los hubo).
Entonces comienza la desesperación y
ansiedad por querer subsanar dicho defecto. Esta es una pregunta que recibo a
diario como veterinario, pero mucho más como Juez de la Raza.
Lo grave es que siempre algún
comedido que se cree conocedor del tema ya les ha indicado cual es la solución
y no solamente se perdió tiempo sino que creo falsas expectativas haciendo
creer que usted lo podía solucionar.
Salvo que el problema sea una
afección, patología o alteraciones de crecimiento, la mayoría de los problemas
de conformación (estructura del animal) no tienen solución a no ser que sea un
estado que tiene que ver con el crecimiento y desarrollo osteoarticular.
Estos desvíos de conformación o de
defectos temporales según sea el lugar que se produzcan pueden revertir o en la
mayoría de los casos acentuarse con el desarrollo.
Como ejemplo podemos estar seguros
que las angulaciones de los miembros, tienden a perderse a medida que el animal
llega a los 5 a
7 meses de edad. El perro tanto de profundidad como de amplitud entre los 6 a 9 meses parece ser escaso
puesto que al crecer los huesos largos y abrirse las angulaciones provoca que el codo descienda dando la
sensación de falta de pecho, pero luego de unos meses el tórax parece llegar
nuevamente al codo, con la amplitud sucede lo mismo.
Cuando miramos al animal desde
arriba y este tiene buen arqueo de costillas la amplitud llegará a ser
importante; pero si el cachorro tiene costillas planas y una mala ubicación de
la esciptula probablemente conserve su escaso desarrollo de por vida.
Así podríamos enumerar las partes de
la estructura de un perro que puede presentar fallas temporarias o no. Pero lo
importante que quiero destacar es la perdida de tiempo, expectativas y
sufrimiento del animal cuando se le hace caso a esas recomendaciones de los
“expertos” que distan mucho de tener un asidero lógico y menos aún buenos
resultados.
Si el perro tiene un dorso flojo
“pobre perro” desde dormir como un fakir enrollados a matarlo de hambre para
que al tener menos peso el dorso no se deforme. Estas son todas viejas teorías
de criadores antiguos, poco informados científicamente. La columna vertebral se forma en el embrión
con una información genética en cuanto al largo y forma, y no hay nada que lo
solucione. Si el perro se arreglo fue por lo que decíamos anteriormente de
fallas temporarias de crecimiento, y no gracias a dormir compactado y esta
famélico de hambre.
Otras tantas estupideces se dicen
respecto a los aplomos, aquí podríamos decir que también el resultado final de
los aplomos se va a deber a la suma de la genética y el medio ambiente, este
último a su vez esta compuesto por la alimentación, sanidad, tipo de piso que
viva el cachorro, y manejo del mismo (poco ejercicio o demasiado movimiento,
higiene, Etc.).
Todos estos aspectos van a influir
en el tipo de aplomo con que finalice el crecimiento del perro, pero si nos
falta el componente genético, por más que el medio ambiente sea de excelente
nivel, no sirve de nada ya que el cachorro salió chiquito por la abuela o el
padre del mismo. Hay líneas de sangre que tiene una mayor predisposición a
tener problemas en el crecimiento (hipotiroidismo, alteraciones metabólicas,
osteoarticulares, etc.), que va a influir en estos cachorros muchas mas que en
otra lechigada criada de la misma forma y en el mismo ambiente.
Muchas veces la ansiedad del
expositor lo lleva a cometer errores al usar una deducción sin base
científicas, en vez de un comprimido de determinada sustancia le dan tres, o
cometer el error de trabajar un cachorro en trote o movimiento forzado mucho
más que las jóvenes articulaciones y ligamentos pueden soportar.
He visto alteraciones de aplomos y
de estado general porque el lugar de crianza no es el adecuado, muy pequeño,
con pisos resbaladazos, poca higiene, falta de ventilación, desparasitaciones
insuficientes o lo peor que en momentos de crisis como esta, la alimentación
esta muy lejos de ser la ideal.
Es común ver cachorros de dos o tres
meses que vienen a mi consultorio con falta de desarrollo y kilos, y cuando
pregunto por el tema me dicen que le recomendaron no darle mucho de comer para
evitar problemas de desarrollo y estos cachorros se exponen a tener faltas de
reserva para hacerle frente a una diarrea simple de 2 días. Siempre es
conveniente que el cachorro este bien alimentado prefiriendo un animal algo más
gordito con reservas que uno delgado de mal aspecto general.
Volviendo al tema principal, hay
desvíos de conformación que tienden a empeorar con el desarrollo, las grupas
siempre parecieran que se acortan e inclinan más que cuando elegimos el
cachorro sospechando que no iba a ser muy correcta. Las cabezas que en el
cachorro creíamos algo pesadas, suelen terminar pesadas. Si su cachorro a los
ocho meses no llegó a la altura deseada, no siga esperando.
Si sus manos a los siete meses no
pisan como un gato, pisará siempre así sin más remedio que la resignación del
propietario, puesto que si había algo que hubiera sido posible hacer, ya es muy
tarde.
Siempre hay excepciones a la regla,
pero son muy raras. Los ojos tienden a redondearse con el crecimiento, no elija
un cachorro con ojos algo redondos, de hocico débil, ya que no va a mejorar.
Los ojos y los hocicos ya se ven a partir de los 60 días de vida.
Es normal que entre los 5 y 7 meses,
por la onda de crecimiento, el cachorro crezca más de atrás, pareciendo que
pierde ángulo trasero, se afloja el dorso. Estas son modificables pero
solamente con paciencia, no con comprimidos ni inyecciones. Tenga cuidado usted
en su desesperación por querer mejorar su cachorro, puede cometer errores
irreversibles en su hermoso animal
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Publicado en DCA año 2004
